Los Problemas de Europa ... Preparando El Escenario

¿Preparación del escenario profético?

Marzo - Abril 2012  por Rod Hall
Debido a la crisis de la deuda europea, el sueño de integración económica de la élite del continente se encuentra en peligro. ¿Habrá una división? ¿Qué revela la Biblia acerca del futuro de Europa?

Los líderes europeos están librando una dura batalla para mantener unidas a la eurozona (los países que usan el euro como moneda común) y la Unión Europea (UE), mientras enfrentan una crisis financiera que amenaza dividir ciertas alianzas forjadas durante el último siglo.
El 9 de diciembre de 2011, todos los líderes de los estados miembros, excepto Gran Bretaña, acord-aron una unión fiscal con la aprobación centralizada del presupuesto. Mientras que algunos consideran esto como un logro monumental, otros creen que el acuerdo propuesto no será aprobado.
Si se rechaza el llamado a una integración fiscal, ¿se habrá acabado para siempre el sueño de una unión económica europea? ¿Está realmente Europa en peligro de fragmentarse? ¿Qué dice la Biblia al respecto?
El desarrollo de una unión monetaria
La eurozona emergió de la formación de la Unión Monetaria Europea en 1999, y rápidamente creció hasta incluir a 17 naciones europeas. El euro reemplazó a las monedas nacionales. Como no ha habido una representación común ni políticas gubernamentales o fiscales respecto a las monedas entre los estados miembros, se ha producido cierto grado de cooperación entre los ministros de economía mediante reuniones del Grupo del Euro.  Debido a la última crisis financiera, la
eurozona ha establecido medidas precautorias para garantizar préstamos de emergencia a los estados miembros, como respuesta a la promulgación de reformas económicas.
Los miembros han establecido además cierta integración fiscal limitada, como la revisión anual de los presupuestos nacionales de los otros miembros, medida altamente política y controvertida. Como ya se mencionó, la unión fiscal ahora sí podría materializarse.
Alemania y Francia son la columna vertebral de la eurozona y han estado presionando para lograr una mayor integración y controles más estrictos. Pero a menudo deben enfrentar la resistencia de otros
miembros, quienes en la actualidad tienen un voto igualitario.
¿Una Europa de dos niveles?
En los últimos años ha habido una gran discusión en los altos mandos respecto a una mayor revisión de la eurozona y la Unión Europea. La agencia noticiosa Reuters informó el 9 de noviembre de 2011 que “autoridades alemanas y francesas han discutido planes para una revisión radical de la
Unión Europea, que involucraría establecer una eurozona potencialmente más pequeña y más integrada, según una fuente de la UE. “‘Francia y Alemania han llevado a cabo intensas eliberaciones respecto a este tema durante los últimos meses, en todos los niveles’, informa un funcionario de
la UE en Bruselas, quien le pide a Reuters mantener su identidad en el anonimato debido a lo delicado del tema.
“‘Debemos proceder con precaución, pero la verdad es que necesitamos establecer exactamente la
lista de aquellos que no quieren ser parte del club y aquellos que simplemente no pueden serlo’, dijo el funcionario.  “El presidente francés Nicolás Sarkozy entregó un adelanto de su opinión durante una reunión con estudiantes en Estrasburgo, una ciudad al este de Francia . . . cuando dijo que una Europa de dos velocidades, es decir, la eurozona, que se mueve más rápido, y los 27 países de la UE
[mucho más lenta], era el único modelo para el futuro”.
“Las discusiones entre los órganos legislativos en Paris, Berlín y Bruselas, generaron la posibilidad de que uno o más países abandonen la eurozona, mientras el resto presiona por una mayor integración
económica, incluyendo la política fiscal y de impuestos” (Julian Toyer y Annika Breidhardt, “French and Germans Explore Idea of Smaller Euro Zone” [Franceses y alemanes exploran la idea de una eurozona más pequeña]).
El mismo artículo luego agrega: “Las últimas discusiones entre los funcionarios europeos apuntan a una reevaluación fundamental, incluyendo cuáles países y que políticas se necesitan para mantenerse fuertes y estables, antes de que la crisis financiera europea lo destruya todo.  “En gran parte, el objet-ivo es reorganizar el bloque monetario según el plan original: países fuertes y económicamente integrados y compartiendo una sola moneda, como era antes de que países como Grecia se las arreglaran para ingresar”.  Y el paso hacia este desarrollo se está acelerando: “Mientras que una Europa de dos velocidades, a la que se refirió Sarkozy, es ya una realidad en muchos aspectos . . .
las autoridades entrevistadas por Reuters hablaron de un proceso más formal para crear una estructura de dos niveles y permitir que el grupo más pequeño siga adelante.
‘Esto es algo que ha estado en el aire por algún tiempo, al menos en conversación, en las altas esferas’, dijo un diplomático de la UE. ‘La diferencia ahora es que algunos países están avanzando demasiado rápido . . . El riesgo de una división, de una Europa de dos velocidades, nunca ha sido más real’”
  Nota: El presidente Nicolás Sarkozy y la canciller alemana Ángela Merkel encabezan una alianza europea más estrecha e integrada, cuyo resultado final ha sido descrito en la profecía bíblica.
Intentos por mantener solventes a Grecia e Italia
Para aliviar la presión de la reorganización y reforma de la eurozona y evitar así una división en el corto plazo, el bloque fue obligado a proveer los fondos para rescatar a Grecia. En octubre pasado, los líderes de 17 países de la eurozona aprobaron una amortización del 50% de la deuda soberana que
Grecia tenía con los bancos, y el incremento cuadriplicado (a casi un billón) de los fondos de rescate retenidos por el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera, el vehículo financiado por los miembros de la eurozona para combatir la crisis económica.  El ex vicepresidente del Banco Central
Europeo, Lucas Papademos, encabeza la nueva unidad de gobierno en Grecia y está trabajando para implementar las medidas de austeridad requeridas por el acuerdo de rescate.
El gobierno italiano también aprobó las medidas de austeridad exigidas por las autoridades del banco central y la Unión Europea, evitando eficazmente un desmoronamiento, al menos por el momento. El ex comisionado de la UE, Mario Monti, está liderando los nuevos esfuerzos del gobierno italiano para
abordar la aguda crisis financiera.
Sin embargo, a pesar de que Italia es la tercera economía más grande de la unión monetaria, su Producto Interno Bruto (PIB), aún está en 5 puntos porcentuales por debajo del nivel alcanzado en 2008. Por lo tanto, es difícil creer que Italia pueda salir del hoyo económico por sí misma. Además, con las tasas de interés en constante alza, se hace más complicado para los italianos el cubrir los costos de pedir prestado para pagar sus deudas. Por esta razón, algunos economistas ven las medidas de austeridad promulgadas por Italia como una simple postergación del problema. Crece la preocu-pación de que no existan suficientes fondos para un rescate posterior si es que ello fuese necesario.
Nadie Quiere Poner Fin al Euro
Aunque las últimas medidas en Grecia e Italia han ayudado a aliviar la amenaza inmediata del desplome económico de la eurozona, al menos otras cuatro naciones están al borde de una crisis financiera, con problemas estructurales y de deuda: Irlanda, Portugal, Chipre y España.
Muchos expertos dicen que se requieren cambios drásticos en la zona del euro si se pretende seguir con esta moneda de 13 años de vida. Alemania y Francia están presionando para lograr una mayor integración y controles más estrictos al interior de la zona, incluyendo áreas más sensibles, como la de impuestos personales y corporativos. El resto de la Unión Europea quedaría como una “con federación”, expandiéndose posiblemente de 27 a 35 países en la década venidera.
La canciller alemana Ángela Merkel pidió un cambio en el tratado con la Unión Europea, resionando a los 27 estados miembros a dar su aprobación y diciendo que se requiere de un rápido avance. Las propuestas alemanas darían a la Comisión Europea un rol más preponderante en el monitoreo de
presupuestos y la implementación de sanciones para aquellos que violen los límites del déficit acordado.
Esto condujo al acuerdo concertado el 9 de diciembre de 2011. El Primer Ministro británico, David Cameron, cuyo país es miembro de la UE, pero no de la eurozona, provocó la ira de la canciller Merkel y del presidente Sarkozy cuando pasó a ser el único líder europeo que se opuso a un pacto financiero que habría impuesto controles más estrictos sobre las políticas fiscales de los estados
miembros. Una de las principales preocupaciones de Cameron era que las crecientes normas y regulaciones fiscales de la UE se convirtieran en una carga innecesaria para el poderoso distrito financiero de Londres.  Muy irritado, Sarkozy le respondió a Cameron, diciendo: “No puedes pretender negarte a adoptar el euro, y al mismo tiempo desear ser parte de todas las decisiones
que afectan a la moneda que no deseas y a menudo criticas”. La respuesta alemana fue clara: “Si quieres ser parte de Europa, debes someterte a las reglas”
(Anthony Failoa, “Standing Alone” [Parándose solo] The Washington Post, dic. 11, 2011).
La decisión de Cameron puede ser el primer paso para que Inglaterra abandone la Unión Europea. Él está en contra de una Europa de dos niveles y dos velocidades, temiendo que aquellos que no sean parte de la unión se conviertan en ciudadanos de segunda clase. Por último, él cuestiona que los países de la eurozona sean capaces de manejar sus deudas para sobrevivir como unión.
Otros comparten esta visión, incluyendo al economista Joseph Stiglitz, ganador del Premio Nobel. Él ha afirmado que el euro podría disolverse “en cualquier momento” y que las naciones de la eurozona probablemente son incapaces de resolver “realmente” su crisis financiera soberana (“Stiglitz Says
Euro Currency Could Dissolve at ‘Any Time Now’” [Stiglitz dice que el euro podría disolverse en cualquier momento], Bloomberg, oct. 25, 2011).
La gran división
Si la eurozona eventualmente se dividiera, ¿cómo sería esa división? El ex presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Alan Greenspan, ha afirmado: “La UE está destinada a fracasar, al
menos como un bloque monetario, debido a que las diferencias culturales entre los países del norte y del sur son demasiado grandes como para permitir una sola política monetaria” (citado de Greenspan: European Union Doomed to Fail” [Greenspan: La Unión Europea destinada al fracaso] Moneynews.com, oct. 26, 2011).
El periódico The Wall Street Journal entrega detalles adicionales acerca de este punto de vista. Greenspan dijo que ciertos países, como Grecia e Italia, nunca han abandonado su estilo de vida, que prioriza el gozo y el placer antes que el trabajo duro. En contraste, los países del norte, como Alemania, la economía más potente de la actual unión, son mucho más prudentes y competitivos y se proponen metas a largo plazo. “‘Los mercados están diciendo básicamente que una gran cantidad de estos países están competitivamente fuera de forma y que no pueden ser parte de los desafíos de la economía global’, agregó Greenspan (Javier David, “Greenspan: Europe’s Debt Crisis Come
Down to North vs. South” [Greenspan: la crisis financiera de Europa se reduce al Norte versus el Sur], nov. 10, 2011).
Una edición de la revista británica The Economist (El economista) en el año 2011 se tituló: After Eurogedon? Frequently Asked Questions About the Breakup of the Eurozone (¿Después del Eurogedón? Preguntas frecuentes acerca de  la desintegración  de la eurozona), lo que coincide con el
pensamiento de Greenspan:  “Las predicciones absolutas son complicadas, pero se ve mucho más probable una fractura entre la fuerte ‘médula’ del norte y la débil ‘periferia’. El proceso, según lo que
vemos, probablemente implicaría que los países de la periferia se separen individualmente para dejar un ‘remanente’ de países del norte aún dentro de una unión monetaria.
Una vez que un país periférico (Grecia, por ejemplo) salga, todos los otros países vulnerables lo seguirán”.
Este documento procede a nombrar los países con más probabilidad de retirarse, como Portugal, Irlanda, Italia, España, Malta y Chipre. Luego añade: “Hasta diez países podrían seguir siendo miembros del euro: Alemania, Francia, Austria, Bélgica, Finlandia, Luxemburgo, Holanda, Eslovaquia, Eslovenia, y Estonia (estos últimos tres, aunque pequeños, son economías abiertas como Malta y Chipre, pero con fundamentos saludables)”
Un imperio dominante de 10 naciones
Como hemos visto, muchos líderes y economistas sienten que es solo cuestión de tiempo el que la UE y la eurozona se vean obligadas a rearmarse, con diferentes grupos en distintas direcciones y a diferentes velocidades. Un grupo central más pequeño de la eurozona está por emerger como el gran líder económico de Europa. Es interesante notar que algunos creen que ese núcleo estará compuesto de alrededor de 10 naciones. Mientras que el grupo final de naciones específicas puede muy bien ser diferente, los estudiantes de la profecía bíblica entienden el significado del número 10.
El profeta Daniel escribió exhaustivamente acerca del “fin de los tiempos”, aquel periodo justo antes de que Jesucristo regrese a establecer su reino sobre la tierra. El surgimiento de una nueva super-potencia mundial, centrada en Europa, es clave en estos eventos.
Daniel revela algunos de los detalles de cómo será aquella superpotencia imperial. Como se relata en Daniel 2, el rey Nabucodonosor de Babilonia soñó con una gran imagen humana. Dios reveló a Daniel que los segmentos de esa imagen representaban una serie de imperios que emergerían.
El último, una resurrección del Imperio romano, está aún por venir. En la imagen fue simbolizado por 10 dedos, que representaban a 10 “reyes” o líderes de naciones, quienes formarían este imperio final. La descripción dada se asemeja preocupantemente a los grupos de algunas de las naciones que
componen la Unión Europea actualmente. Los dedos estaban compuestos “en parte de barro cocido de alfarero y en parte de hierro”, lo que indica que “será un reino dividido” y “el reino será en parte fuerte, y en parte frágil” (vv. 41-42). Y “así como el hierro no se mezcla con el barro”, los comp-onentes de este reino no estarán unidos por mucho tiempo (v. 43).
 Este agrupamiento de 10 naciones se describe de tal manera, que parece indicar que ellas preservarán su cultura individual y su estructura política. Algunas serán mucho más fuertes que otras, y cederán su poder y autoridad a lo que el libro de Apocalipsis describe como un líder despiadado y astuto
como un animal, la bestia, y su sistema (Apocalipsis 17:12-14).
Este sistema final llevará al mundo al borde de la destrucción total. Pero las buenas noticias son que Jesucristo promete que a su regreso salvará a los seres humanos de la destrucción y establecerá su reino sobre todas las naciones (v. 14, Daniel 2:44). Estemos atentos a lo que sucede en Europa. El final de esta era se acerca más rápido de lo que la mayoría alcanza a percibir.
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El Vaticano impulsa una autoridad mundial política y económica

Recientemente, el Vaticano insistió en su llamado para la creación de una “autoridad política mundial” con amplias facultades, con el fin de regular los mercados financieros y frenar la “deformación y desigualdad del sistema capitalista” (Vatican Document Calls for ‘Supranational’ Reform” [Documento del Vaticano convoca a una ‘reforma supranacional’], America: The National Catholic Weekly [América: Semanario católico nacional], nov. 7, 2011).
De acuerdo a la profecía bíblica, en los tiempos del fin habrá un sistema económico mundial contro-lado desde una sede central, como el que propone el Vaticano, y estará encabezado por una gran religión falsa y su líder. ¿Podría el documento citado servir como modelo?
El documento de 41 páginas, titulado “Toward Reforming the International Financial and Monetary
Systems in the Context of Global Public Authority” (Hacia la reforma del sistema financiero y monetario internacional en el contexto de una autoridad pública global), fue preparado por el Consejo Pontificio para la Justicia y la Paz. Tal documento sostiene que es necesaria una “autoridad supranacional” para que el bien común se convierta en el centro de la actividad económica inter-nacional.  El documento cita las enseñanzas de los papas en los últimos 40 años sobre la necesidad de una autoridad pública universal que trascienda los intereses nacionales; además, insiste en imple-mentar dicha autoridad lo antes posible, debido a la creciente disparidad entre ricos y pobres y a la crisis económica global. Un paso importante, señala, consistiría en reformar el sistema monetario internacional de manera que involucre a los países en desarrollo.
El documento alienta la creación de un “banco central mundial” que regularía el flujo del intercambio
monetario. Igualmente, sugiere gravar con impuestos las transacciones financieras, crear un “fondo
mundial de reservas”, recapitalizar los bancos con  fondos públicos, recompensar el comportamiento “virtuoso” en el manejo de las economías y que haya un amplio control sobre los países y los “mercados alternativos”.  Tal como informa la agencia noticiosa Reuters, el documento insta además a “una transferencia gradual y equilibrada de una parte de las facultades gubernamentales de cada nación a una autoridad global y sus autoridades regionales “ (citado por Philip Pullella, “Vatican Urges Economic Reforms, Condemns Collective Grief” [El Vaticano impulsa reformas económicas, condena la avaricia colectiva], oct. 24, 2011).
“’En un mundo en vías de rápida globalización, la alusión a una autoridad mundial se convierte en la
única opción acorde con las nuevas realidades de nuestro tiempo y las necesidades de la humanidad’,
afirma. ‘Ayudar a marcar el comienzo de esta nueva sociedad es deber de todos, especialmente de los
cristianos’” (James Martin, “Vatican Issues Major Document on Global Financial Reform” [El Vaticano publica importante documento sobre la reforma financiera global], Catholic News Service [Servicio de noticias católico], oct. 24, 2011).
El informe de Reuters cita una sección del documento que explica por qué el Vaticano considera
fundamental la reforma de la economía mundial: “‘En asuntos económicos y financieros, las difi-cultades más importantes provienen de la falta de un conjunto eficaz de estructuras que puedan garantizar, además del sistema de gobierno, un régimen que administre la economía y las finanzas internacionales’, afirmó . . .
“El mundo necesita un ‘marco regulatorio básico en común para administrar el mercado financiero
global’ y ‘algún sistema mundial de administración monetaria’.  “‘De hecho, es cada vez más evidente el deseo generalizado de crear un organismo que funcione como una especie de ‘banco central mundial’ que regule el flujo y el sistema de intercambio monetario, tal como lo hacen los
bancos centrales nacionales’, agregó”.  El llamado del Vaticano a conformar una “autoridad pública mundial” y un “banco central mundial” con “autoridad supranacional”, nos recuerda lo que dice la Biblia respecto del establecimiento de un sistema con esas características.
Dicho sistema estará comandado por un importante líder religioso, que en Apocalipsis 19:20 se
denomina “el falso profeta”. Otro personaje mencionado aquí y en Apocalipsis 13 es “la bestia”, un líder político y su sistema, que colaborarán con un líder religioso y su sistema, que a su vez son representados también como una bestia: “Después vi otra bestia que subía de la tierra, y tenía dos cuernos como un cordero, pero hablaba como un dragón [de apariencia cristiana, pero en realidad, de origen diabólico] y ejerce toda la autoridad de la primera bestia en su presencia” (Apocalipsis 13:11-12).
Note ahora los versículos 16-17: “Y hacía que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y
esclavos, se les pusiese una marca en la mano derecha o en la frente, y que ninguno pudiese comprar ni vender sino el que tuviese la marca o el nombre de la bestia, o el número de su nombre”. Tal como lo propone el Vaticano, este sistema económico de control centralizado tendrá alcance mundial y “jurisdicción universal”. Se apoderará parcialmente de la autoridad nacional de los países, para su propio beneficio.  Se premiará a los que se comporten de manera “virtuosa”, pero se castigará con severidad a aquellos que no estén de acuerdo con sus directrices e intenten hacer negocios en los “mercados alternativos”.  Todos se verán obligados a acatar el sistema para poder comprar o vender.
Es probable que ya se estén echando los cimientos para todo lo que se avecina.

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Preparando el escenario para el cumplimiento de la profecía

En 1933, Winston Churchill hizo esta aterradora advertencia: “Nadie
puede contemplar los eventos que se están desarrollando en Alemania
sin experimentar una creciente ansiedad por el desenlace de ellos”. Con
esta crisis económica que afecta a la eurozona, ¿se repetirá la atribulada
historia de Berlín? ¿Cuál es el destino de Alemania? ¿Nos entrega la
profecía bíblica algún indicio sobre el rumbo que están tomando los
acontecimientos en Europa?


El fallecido escritor británico John Stott resumió así el pensamiento de muchos: “La mayoría de nosotros se siente desmoralizada por la desgarradora tragedia que afecta a este mundo caótico. Nuestra supervivencia misma está en peligro. El ciudadano común y corriente a menudo se siente
como una víctima indefensa de la enmarañada red política, o como una pieza sin rostro en la maquinaria de la sociedad moderna” (Basic Christianity [Cristianismo básico], 2008, p. 152).
El apóstol Pablo predijo que tales serían las condiciones durante los últimos días de la sociedad humana (2 Timoteo 3:1-5). Por este motivo es que nuestros artículos alusivos a las tendencias regionales y mundiales últimamente se han enfocado en lasbuenas nuevas garantizadas por las profecías de la Biblia.
Pero la Biblia misma es muy enfática al afirmar que el maravilloso mundo del futuro será precedido de condiciones devastadoras, de una magnitud jamás vista por la raza humana (vea Mateo 24:21-22; Daniel 12:1; Jeremías 30:7). ¡El estado del mundo será tan calamitoso, que la supervivencia humana se hallará en serio peligro!
Los titulares de nuestras noticias muestran que las profecías escritas en la Biblia hace muchos siglos están comenzando a cumplirse de manera importante. Esto es evidente en Europa Central y en el Medio Oriente. Este artículo en particular se enfoca en Europa (aunque usted puede adquirir más conocimiento sobre el rol profético de otras regiones mediante la lectura de nuestro folleto gratuito El Cercano Oriente en la profecía bíblica y también de los artículos relativos a Israel y el Medio Oriente
que aparecen regularmente en esta revista).
¿Qué nos dice la profecía bíblica acerca del futuro de Europa? Los libros bíblicos de Daniel y Apocalipsis nos muestran que en el tiempo del fin surgirá un poder nuevo y dictatorial con sede en Europa. En este artículo veremos cómo, al parecer, el escenario para el cumplimiento de estas profecías está siendo ya preparado.
Europa como entidad unificada Europa es un jugador clave en la economía mundial. A pesar de todo lo que se dice sobre las economías de los Estados Unidos y China, la Unión Europea (UE) es el bloque económico más grande y más rico del mundo.
Europa también ha sido el escenario de innumerables guerras en el transcurso de los siglos y el punto geográfico que dio origen a dos guerras mundiales en la primera mitad del siglo 20. En el corazón mismo de ambos conflictos bélicos por el control de Europa se hallaba Alemania, que ahora
está aliada política y económicamente con otras naciones europeas para lograr la formación de los Estados Unidos de Europa.

“En lugar de restringir el potencial geopolítico de Alemania, la UE ahora lo acrecienta; Alemania está a punto de convertirse nuevamente en una gran potencia”.

La firma de inteligencia global Strategic Forecasting, Inc. (Predicciones Estratégicas, Inc.), mejor conocida como Stratfor, es sumamente respetada por sus análisis de las tendencias mundiales y regionales. Hace algunos meses, hizo notar que “el futuro de Europa [está] ligado al proceso
de toma de decisiones en Alemania” y que “Europa no puede funcionar como una entidad unificada a menos que alguien esté al mando de ella”.
Procedió a explicar que “en la actualidad, Alemania es la única nación con una economía y una población suficientemente grandes como para poder ejercer ese tipo de control” (Germany’s Choice: Part 2 [La opción de Alemania: Segunda parte], julio 26, 2011, énfasis nuestro en todo este artículo). En meses recientes hemos visto una y otra vez la demostración de estas afirmaciones, en la medida que Alemania se ha posicionado —a veces abiertamente; otras, detrás de bambalinas— para asumir
el liderazgo en la futura dirección de Europa.
En estos momentos existen dos posibles escenarios para el futuro de Europa. En uno de ellos, el más popular, se estima que la actual generación de alemanes se ha vuelto defensora acérrima de la libertad
y la democracia, ya que está plenamente consciente de los peligros de que se repita la terrible historia de Berlín durante la primera mitad del siglo 20, cuando sus ambiciones llevaron al estallido de dos guerras mundiales.
La segunda perspectiva sostiene que la prolongada crisis europea (gatillada inicialmente por la descontrolada deuda de Grecia, pero que después se difundió de manera imparable a otras convulsionadas economías europeas), eventualmente culminará con el surgimiento de un centro
neurálgico que pueda intervenir y resolver la crisis: un nuevo imperio liderado por Alemania.
Los proponentes de esta proyección, basada en las actuales tendencias, creen que las naciones del sur de Europa están programadas para caer bajo el dominio de Berlín, y que en el largo plazo, hasta
los enormes gastos en que ha incurrido Alemania para rescatar a otras naciones valdrán bien la pena. En otras palabras, Alemania tendrá éxito en lograr por medio de su poder económico lo que no pudo
conseguir mediante su poder militar en el siglo pasado.
¿Hay alguna indicación histórica o bíblica acerca de cuál de estas dos perspectivas
prevalecerá?
“Todo se reduce a Alemania”
El recuerdo de las dos guerras mundiales iniciadas por Alemania frecuentemente ha estado presente en la mente de los pueblos europeos de la postguerra. En 1977, el entonces presidente francés Valery Giscard d’Estaigne advirtió que un fracaso de los esfuerzos para integrar económicamente a
Europa (algunos de los cuales llevaron a la creación del actual euro) podría conducir “a una influencia preponderante de Alemania” en los asuntos europeos (Celestine Bohlen, “Euro Unity? It’s Germany That Matters” [“¿Unidad europea? Alemania es lo que importa”], The New York Times,
marzo 9, 2010).
La estrategia de otras naciones europeas en décadas recientes ha sido la de comprometer a Alemania para que se involucre estrechamente con la Unión Europea, a fin de impedir que sus notorias tendencias nacionalistas de antaño amenacen la soberanía e integridad territorial de los demás
países. Esta fue una poderosa motivación detrás del constante esfuerzo por una integración europea que pudiera llevar eventualmente a una Europa unificada.
Pero, ¿funcionará realmente esta estrategia en el largo plazo, como se espera, si consideramos las profundas disparidades de pueblos y culturas en el continente europeo? Con una Europa que se ve enfrentada a una dolorosa y divisiva crisis económica, ¿acabará Berlín dirigiendo prácticamente
todas las actividades de la UE?
Al parecer, la respuesta es cada vez más clara. El artículo citado más arriba afirma: “Diez años después del euro, Alemania todavía es la protagonista, lo que no debería ser . . . El presidente francés Nicolás Sarkozy puede venir y jurar todo el apoyo a Grecia que se le antoje, pero al fin y al cabo, lo único que importa aquí es Alemania” (ídem).
La revista Newsweek hace poco destacó: “Quién es el gran beneficiario de la existencia del euro? La respuesta es Alemania . . . El resto de la eurozona absorbe un 40 por ciento de las exportaciones alemanas . . .” (John Eatwell, “Euro Vision” [“Visión europea”], sep. 5, 2011).
El informe de Stratfor citado anteriormente también comentó: “A pesar de sus fallas, el sistema que actualmente administra a Europa ha garantizado a Alemania riquezas de alcance global sin que se
haya perdido una sola vida alemana. Debido a los horrores de la Segunda Guerra Mundial, este hecho no es algo que puede descartarse con liviandad. Ningún país de Europa se ha beneficiado más por la eurozona que Alemania. Para la élite alemana, la eurozona era una manera fácil de hacer que Alemania tuviera relevancia en el escenario mundial sin ningún tipo de revitalización militar, lo que hubiese sembrado el pánico por toda Europa y la ex Unión Soviética. Y además, hizo que los alemanes se enriquecieran”.
Avanzar para controlar
Es muy evidente que Alemania está dando pasos para ejercer control en esta actual crisis económica. El informe Stratfor destacó además que por largo tiempo Alemania estuvo satisfecha de estar a la retaguardia en cuanto a liderazgo, pero ya no es así.
Frente a la crisis económica que se está expandiendo entre los países del sur de Europa, Alemania es la única potencia europea que cuenta con suficiente poder financiero para rescatarlos a todos, y ha maniobrado silenciosamente detrás de bambalinas para ponerse en el asiento delantero.
Alemania ha creado un nuevo mecanismo de rescate que, como observa Stratfor, “recibe sus órdenes de los alemanes. Este mecanismo no es parte de los tratados de la UE, pero sus operaciones son ejecutadas por un banco privado, cuyo director es alemán . . . Para poder obtener el dinero,
lo único que tienen que hacer los países atribulados es hacer cualquier cosa que Alemania —la administradora de los fondos— desee . . .“La aceptación de la ayuda del FSFE (Fondo para la Seguridad Financiera Europea) significa aceptar el sometimiento de la autonomía financiera a los jefes alemanesdel FSFE. Por ahora, eso significa aceptar los programas de austeridad diseñados por
Alemania, pero no hay nada que obligue a los alemanes a limitar sus condicioMountain High Maps/Shaun Venishnes a los ámbitos puramente financieros o fiscales.
“Para todos los efectos prácticos, el próximo capítulo de la historia ya se ha abierto en Europa. Sin importar cuáles sean sus intenciones, Alemania acaba de experimentar un importante desarrollo en
su habilidad para influenciar a los estados miembros de la UE y colegas suyos, particularmente aquellos que están pasando por dificultades económicas. Ahora puede usurpar grandes cantidades de soberanía nacional.
“En lugar de restringir el potencial geopolítico de Alemania, la Unión Europea ahora lo acrecienta; Alemania está a punto de convertirse nuevamente en una gran potencia.Esto no significa que sea inminente un resurgimiento de la Wehrmacht [fuerzas militares nazis], pero la reemergencia de
Alemania obliga a un repensar de la geopolítica europea y euroasiática”.
“Una verdadera oportunidad para lograr la unión política en Europa”
La revista de noticias británica The Economist (El economista) observó recientemente: “De repente . . . Berlín está muy alborotado a raíz de las conversaciones sobre una restructuración de la Unión Europea: la emisión de euro-bonos, la renegociación de los tratados de la UE, y hasta la creación de una Europa federal” (“Germany’s Euro Question” [“Alemania y la cuestión del euro”], sep. 10, 2011).
¡El rediseño de las instituciones de la Unión Europea súbitamente se ha convertido en el tema de moda en Alemania!
Un tema que encierra especial interés es el reavivamiento del federalismo. El artículo de El economista mencionado más arriba continúa: “Los alemanes euro-federalistas han despertado después de un largo sopor. No es sorpresa que Joscha Fischer, el portavoz del Partido Verde [quien sirvió como ministro de relaciones exteriores y vice-canciller bajo el ex canciller alemán Gerhard Schroeder], promueva la formación de los ‘Estados Unidos de Europa’”.
De acuerdo a un artículo de la agencia noticiosa Reuters del 4 de septiembre de 2011, el mismo Schroeder también hizo un llamado a favor de la creación de los “Estados Unidos de Europa”, declarando: “La presente crisis no deja ninguna duda de que no podemos tener una zona con moneda común sin una política también común en las áreas fiscal, económica y social . . . Tendremos que resignarnos a ceder nuestra soberanía nacional . . . y eso significa los Estados Unidos de Europa . . . Esta crisis ofrece una gran oportunidad para alcanzar la unión política de Europa”.
Fortalezas y debilidades en las naciones de la eurozona
Según el Wall Street Journal: “La oficina de estadísticas de Grecia informó que la economía se encogió un 7.3% en el segundo trimestre en vez del 6.9% que se había calculado. La economía griega se ha estado contrayendo durante tres años” (“Greece Slips Further” [“Grecia se deteriora aún más”], sep. 9-11, 2011).
Hace poco, Atenas estuvo solo a unas pocas semanas de que se le acabaran los euros y tener que enfrentarse a una crítica crisis por incumplimiento de pagos. En respuesta, el gobierno griego ha prometido imponer un impuesto a la propiedad para solucionar el déficit de 2 mil millones de euros. Pero, ¿qué posibilidad hay de que esta medida envíe a más ciudadanos griegos a las calles, para
protestar y causar disturbios? Algunos observadores todavía creen que una cesación de pagos por parte de Grecia es algo inminente.
Recientemente, las conversaciones con funcionarios de la Unión Europea y del Fondo Monetario Internacional se paralizaron por desacuerdos en cuanto a las condiciones de los préstamos que Grecia
desesperadamente necesita para evitar el colapso económico. Varias otras naciones del sur de Europa están solo un poco mejor que Grecia.
¿Cómo es que, según afirma el artículo de Newsweek citado anteriormente, “las deudas nacionales combinadas de Grecia, Portugal e Irlanda solo alcanzan a menos de 5% de la deuda de la eurozona”,
y sin embargo, toda la eurozona puede terminar siendo gravemente afectada por los problemas de deuda de esas tres naciones? Esto claramente indica que hubo fallas estructurales de gran envergadura en la forma en que el euro fue diseñado como nueva moneda a principios de 1999.
Esto probablemente tiene cierta relación con lo que la Biblia dice respecto a que justo antes del establecimiento del futuro gobierno de Jesucristo sobre la Tierra, se levantará un poder excepcional centrado en Europa, y los países que lo compondrán son descritos simbólicamente como de hierro mezclado con barro, “en parte de hierro y en parte de barro cocido” (vea Daniel 2:40-44).
El inquietante futuro de Europa
El régimen nazi de Hitler (1933-1945)fue posible solo por una severa crisis que afectó a Alemania durante la última parte de los años veinte y la primera parte de los años treinta. Bajo circunstancias económicas normales los nazis jamás hubiesen llegado al poder. Desde luego, los detalles
son diferentes en la actualidad. Hasta el momento no es Berlín la que está experimentando una crisis económica, sino que otras naciones de la eurozona, principalmente en el sur de Europa. Alemania sigue siendo el principal pagador de Europa.
Pero también puede haber consecuencias para la nación alemana. Hoy en día, los países de la Unión Europea están experimentando serias diferencias políticas y un grado preocupante de división y desunión, debido en gran medida a sus graves problemas financieros. La profecía bíblica indica que la Unión Europea no mantendrá su actual configuración.
Algunos de sus miembros puede que opten por retirarse de la UE, y en algunos casos hasta puede que sean forzados a salirse de ella a medida que la entidad profetizada en la Biblia comience a materializarse (Gran Bretaña, por ejemplo, ha estado en malos términos con la Unión Europea casi desde los comienzos de su ingreso a ella, en 1958).
Finalmente, un nuevo y poderoso mega-estado europeo, cuyo símbolo es “la bestia”, asombrará a un mundo que en su gran mayoría estará desprevenido. Un imponente conjunto de naciones se
aliará para convertirse en la última restauración del antiguo Imperio romano. (Apocalipsis 13:1-8; 17:8-18; Daniel 2:37-45; 7:15-27).
Diez naciones (o grupos de naciones) pertenecientes a este conglomerado renunciarán a su propia soberanía para ser parte de este impresionante poder del tiempo del fin. “Estos tienen un mismo
propósito: entregarán su poder y autoridad a la bestia” (Apocalipsis 17:13).
Estos aterradores acontecimientos afectarán al mundo entero, y prepararán el escenario para los devastadores y peligrosos tiempos en que si Dios no interviene, la raza humana será extinguida (Mateo 24:21-22). Y como todo lo que la profecía bíblica vaticina con toda seguridad sucede, todos debemos poner atención a las palabras del apóstol Pablo. Debido a la transitoriedad del mundo que nos rodea, él exclamó, diciendo: “¡Cómo no debéis vosotros andar en santa y piadosa manera de vivir!” (2 Pedro 3:11).
El hecho de observar cómo está preparándose el escenario para el cumplimiento de las profecías del tiempo del fin debe motivar a cada uno de nosotros para examinar nuestra condición espiritual a la luz de la Palabra de Dios. Un correcto entendimiento de la profecía debería llevarnos al repentimiento y a dedicar nuestras vidas a buscar a Dios y a servirle. ¡El simple conocimiento
académico de la Biblia no es suficiente! Jesucristo nos dice claramente en Lucas 21:36: “Estén ustedes preparados, orando en todo tiempo, para que puedan escapar de todas estas cosas que van a
suceder y para que puedan presentarse delante del Hijo del Hombre” (versión Dios Habla Hoy).

“¿Colapsará el euro?”
La revista Newsweek publicó recientemente: “El pandemónium en la eurozona es un gran
contribuyente a la crisis financiera internacional. La causa inmediata puede atribuirse a las imprudentes políticas aplicadas por los gobiernos y bancos, pero la estructura institucional de la Unión Monetaria Europea es la verdadera raíz del problema” (John Eatwell, “Euro Vision” [“Visión europea”], sep. 5, 2011).
Este artículo de la revista prosiguió con una pregunta: “¿Pueden los europeos desarrollar las instituciones necesarias para hacer funcionar de manera efectiva una unión monetaria, instituciones que en los Estados Unidos tomaron 100 años, una guerra civil y una Gran Depresión para hacerse realidad? ¿O colapsará el euro?”
Tres días más tarde, el Financial Times (Tiempos financieros) publicó un artículo afirmando: Ángela
Merkel, canciller alemana, declaró el miércoles que ‘el euro no fracasará’” (“Merkel Promises Euro ‘Will Not Fail’ [Merkel promete que el euro ‘no fallará’], sep. 8, 2011). El reportaje continuó con la explicación de la canciller de que “Alemania continuará exigiendo una drástica reducción de la deuda por parte de sus socios de la eurozona a cambio de otorgarles garantías financieras”.
No obstante, Merkel enfrenta mucha oposición de la clase intelectual gobernante en Alemania. El
International Herald Tribune (Periódico del Tribunal Internacional) observó que “la crisis de deuda de la eurozona se pone cada vez peor, y Alemania, el guardián autonombrado del euro, está jugando un gran rol en el incremento de la inseguridad.
“A pesar de las repetidas promesas de la canciller Ángela Merkel de que mantendrá unida a Europa, la disonancia del descontento dentro de su propio país se está volviendo casi ensordecedora.
Ello está generando más dudas, justificadas o no, acerca del compromiso de la nación con el euro”
(“Dissent Adds to Euro Zone Uncertainty in Germany” [“Descontento aumenta la inseguridad en
Alemania respecto a la eurozona”], sep. 12, 2011).
El comentarista financiero Thorold Baker, del Wall Street Journal, preguntó: “¿Cuál es el futuro
del euro si los experimentados funcionarios del Bundesbank (Banco Central) de Alemania hanperdido la fe en la institución encargada de supervisar esta moneda?” (“Stark Signals for the Euro” [“Señales alarmantes para el euro”], sep. 12, 2011).
Una persona clave ha renunciado al Banco Central de Europa, aparentemente debido a la posibilidad de decisiones futuras como la compra de bonos soberanos a Italia y España. Este artículo del Journal concluyó con un descarnado análisis: “Aun cuando se le compara con monedas débiles como
el dólar, el futuro del euro como recurso monetario se ve muy sombrío”.
Aun así, muchos observadores experimentados consideran que desechar la eurozona en estos
momentos es altamente improbable, porque creen que las consecuencias serían una catástrofe económica para Europa. Uno de ellos recuerda la Alemania de principios de los años treinta, cuando las condiciones económicas eran tan malas, que una carretilla llena de marcos alemanes solo lograba
comprar medio kilo de mantequilla. ¡Se ha invertido tanto en recursos humanos y monetarios, que se
considera muy arriesgado dar marcha atrás debido a la crisis actual!
Pero las ocurrencias catastróficas son claramente posibles, si no inminentes, en este mundo de economías y políticas inciertas e inestables.
Como declaró la revista Time en forma paradójica a principios de este año: “De los tiempos de caos e
inseguridad puede surgir un orden mundial fuerte y vital . . . Eso sucedió en Europa siglos atrás” (Parag Kanna, “For a New Renaissance” [“Por un nuevo Renacimiento”], ene. 31, 2011).
Desde el punto de vista bíblico, esta declaración semi-profética ciertamente ha sido muy certera en
varias ocasiones en los siglos pasados. Partes de Europa están pasando por problemas ahora, pero
no debemos engañarnos: Europa está en el proceso de convertirse en un imperio con grandiosos
poderes, y Alemania estará al frente.
Algún factor de gran importancia, muy posiblemente la crisis económica que está gradualmente
tomando forma en Europa, obligará a la transformación de la Unión Europea en una alianza mucho
más integrada y poderosa. Esta será la última de una serie de resurrecciones del antiguo Imperio
romano vaticinadas por la profecía bíblica. Para más información, solicite o descargue nuestros
folletos gratuitos El Apocalipsis sin velos y ¿Estamos viviendo en los últimos días?




La deuda europea y estadounidense: Difícil solución

La columnista del Financial Times (Tiempos financieros) Gillian Tett declaró en FTMagazine,
un suplemento de la edición de fin de semana del mismo diario: “Otra semana, otra tanda de lloriqueo por las penurias de la deuda global. En Europa cunde el pánico por las finanzas de lugares como
Italia y Grecia. En América del Norte, el dolor de cabeza por la deuda estadounidense empeora cada
vez más. Y en un nivel más mundano, millones de personas (como yo) acaban de volver de sus vacaciones sintiéndose nerviosas por el próximo estado de cuenta de sus tarjetas de crédito” (“Debt: It’s Back to the Future” [Deuda: Vuelta al futuro”], sep. 10-11, 2011).
El editorial del International Herald Tribune (Periódico del Tribunal Internacional) del 12 de septiembre de 2011 regañó a Europa por su manejo de la deuda de la eurozona, declarando: “Los líderes de Europa creen que pueden impedir el desastre económico sin tomar medidas drásticas. Siguen pretendiendo que no tendrán que pedir a los contribuyentes que ayuden a respaldar a los bancos en problemas . . . y que Europa puede continuar cosechando los beneficios de su unión monetaria sin compartir las responsabilidades de una unión fiscal mayor.
“Nadie cree esto: ni los mercados de crédito, que han elevado las tasas de interés de la deuda nacional; ni el Fondo Monetario Internacional, que ha advertido una y otra vez que los bancos más grandes parecen estar descapitalizados; ni tampoco la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, que la semana pasada pronosticó un crecimiento negativo en el próximo trimestre para Alemania, Francia e Italia, las tres economías más grandes de la eurozona.


Aunque las personas realísticamente no pueden hacer nada en cuanto a estos grandes problemas,
usted sí puede aplicar en su vida muchos principios bíblicos que han soportado la prueba del tiempo.

“El temor más inmediato es que uno o más de los principales bancos de Europa puedan fallar. La
confianza está decayendo porque ellos tienen en su poder grandes bonos griegos, españoles e italianos. Un desplome bancario de grandes proporciones dañaría también la economía de Estados Unidos, lo que explica las urgentes súplicas que hizo Washington la semana pasada a Europa para que desarrolle una estrategia de recuperación y crecimiento” (“Europe’s Fiscal Fantasies” [“Las fantasías fiscales de Europa”].
Desmond Lachman, integrante del Instituto Estadounidense de Empresas, escribió en el Wall Street
Journal y dijo que la crisis financiera en Europa probablemente disminuirá las posibilidades de reelección del presidente Obama. El sistema financiero de Estados Unidos sufre de “exposición masiva a los bancos europeos . . . de más de tres billones de dólares, o aproximadamente el 45% del capital total del mercado monetario” (“The Euro’s Problems are America’s Too” [“Los problemas del euro también afectan a Estados Unidos”], sep. 11, 2011). Lachman teme que Grecia declarará cesación de pago de su deuda nacional antes de fin de año.
Él también afirmó: “A juzgar por los recientes eventos, el partido final de la eurozona está muy
cerca. Las reformas económicas y fiscales de Grecia parecen estar muy descarriladas, y la crisis
de la deuda ahora se ha expandido, desde Grecia, Portugal e Irlanda, hasta España e Italia. Estos dos
últimos países han sido correctamente descritos como “demasiado grandes como para fracasar, y
demasiado grandes como para rescatar”. Estos descomunales problemas de deuda están creando enormes conflictos en el escenario geopolítico mundial. En este punto, nadie puede decir con certeza cómo culminará todo. Pero aunque los individuos realísticamente no pueden hacer nada en cuanto a estos grandes problemas, usted sí puede aplicar individualmente en su vida muchos principios bíblicos que han soportado la prueba del tiempo.



La Nueva Reforma Mundial:  Crees Estar Preparado? Mira Quien Acuso a Los Lideres …
"ES EL TIEMPO DE TOMAR CONSIENCIA Y RESPONSABILIDAD POR TU ALMA"

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